Quiénes son los 14 ministros del Gabinete de Gobierno de Arévalo

El Gabinete de Gobierno de Bernardo Arévalo está conformado por exfuncionarios y profesionales allegados al partido Movimiento Semilla, así como por académicos de destacada trayectoria en su campo. 

En perspectiva. En su propio balance, el presidente electo reconoció que lograron establecer igual número de hombres y mujeres para dirigir la nueva administración, pero faltó integrar a representantes del sector indígena. 

• Arévalo prometió tomar en cuenta a profesionales indígenas en viceministerios y secretarías, así como en otras dependencias públicas. 
  
  

• La abogada Miriam Catarina Roquel Chávez será la ministra de Trabajo y es la única indígena del Gabinete de Gobierno. Fue procuradora adjunta de la Procuraduría de Derechos Humanos durante la gestión de Jordán Rodas y también se ha desempeñado como defensora pública. 
  
  

• El lunes 8 de enero solo fueron presentados ministros, los otros cargos serán anunciados el domingo 14 de enero, indicaron Arévalo y Herrera. 

Por qué importa. La presentación de los funcionarios era esperada desde mediados de diciembre. Según los gobernantes electos, fue difícil tomar la decisión por las diversas sugerencias y hojas de vida que analizaron, pero no tienen dudas que hicieron la mejor elección. 

• Entre los exfuncionarios de carrera destacan Carlos Ramiro Martínez, quien es miembro del servicio diplomático desde 1987. En cuatro ocasiones ha fungido como viceministro de Relaciones Exteriores y como embajador en países y organismos internacionales. 
  
  

• "Es una persona con mucho conocimiento de la política exterior, balanceado, prudente, analítico, honrado y el mejor asesor que un presidente pueda tener", opinó un excanciller. Otra fuente comentó que con su llegada se espera que se valore la carrera diplomática y la profesionalización del servicio exterior. 
  
  

• En el gobierno de Alejandro Giammattei, Martínez fue viceministro. Con Arévalo se conocen porque ambos desempeñaron cargos diplomáticos. 

En el radar. Otros profesionales que ya ejercieron función pública son Francisco Jiménez, quien volverá a dirigir el Ministerio de Gobernación, una de las dependencias de mayor responsabilidad. 

• Según Arévalo, Jiménez es "experto en inteligencia civil para el combate del crimen y en gestión de conflictos sociales". Es filósofo y docente universitario, así como asesor de organizaciones internacionales en temas de seguridad. 
  
  

• Otra profesional con recorrido político y público es Jazmín de la Vega, quien será la ministra de Comunicaciones. Fue diputada durante el gobierno de Álvaro Arzú y asesora en la administración de Óscar Berger. Es una empresaria reconocida en el sector de la construcción y fue tomada en cuenta por su experiencia política, honorabilidad y preparación académica. 
  
  

• El general Henry David Sáenz será el ministro de la Defensa Nacional. En su ámbito es bien visto como un oficial dedicado a sus labores. Destaca por su disciplina, inteligencia y se considera una decisión acertada por su trayectoria en el Ejército. 

Qué destacar. Para algunos fue sorpresa el nombramiento de ministros que se desempeñaban en el sector privado. Anayté Guardado fue designada como ministra de Energía y Minas; fue directora ejecutiva de la Asociación de Generadores con Energía Renovable de Guatemala (AGER).  

• Otros nombramientos van en una línea similar. Por ejemplo, de Gabriela García-Quinn, quien asumirá como ministra de Economía, se indica que tiene experiencia en programas de atracción de inversión y de crecimiento económico orientado a la niñez y sector agrícola. 
  
  

• El Ministerio de Ambiente estará en manos de la bióloga María José Iturbide, quien laboró en el Zoológico La Aurora, Consejo Nacional de Áreas Protegidas y en los ministerio de Agricultura y de Ambiente. También trabajó en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la Fundación para la Conservación del Agua en la Región Metropolitana de Guatemala 
  
  

• El Ministerio de Cultura será dirigido por la antropóloga Liwy Grazioso Sierra. Es una profesional que se desempeñó como directora y curadora del Museo Miraflores y como docente. Estudió en México y Europa y es una apasionada del arte, según sus propias palabras. 

Datos clave. De los ministros que son "de la casa" destaca Anabella Giracca, nombrada al frente de la cartera de Educación. Es fundadora de Semilla, escritora y promotora educativa, con estudios en letras y filosofía. 

• Carmen Aceña, exministra de Educación, considera que es una profesional inclinada a la formación académica, aunque sin experiencia en el sector público. Agrega que el mayor reto será retomar el control de la institución que está en manos del sindicato y obtener recursos para concretar sus proyectos. 
  
  

• Otros dos profesionales de Semilla que serán funcionarios son Abelardo Pinto, al frente del Ministerio de Desarrollo y Maynor Estrada, a cargo del Ministerio de Agricultura. El primero es el actual secretario general del partido y el segundo fue candidato a la alcaldía de Antigua Guatemala por esa organización. 
  
  

• El Ministerio de Salud será dirigido por el médico Oscar Cordón, de quien se indica que fue "Asesor de Salud Pública Mundial en Estados Unidos". Su experiencia radica en seguridad alimentaria y salud materno infantil y reproductiva, entre otras.  

Esbozo del gobierno de Arévalo 

Ayer fueron presentados quienes encabezarán las catorce carteras del Organismo Ejecutivo, en el gobierno de Bernardo Arévalo. El evento ocurrió en el Teatro Nacional y, más allá de que el lugar dio la impresión de una puesta en escena –en política, la forma es el fondo– la trayectoria de quienes formarán parte del gabinete permite esbozar al próximo gobierno. 

La primera impresión al conocer los nombres fue que la retórica de campaña queda atrás; pragmatismo. Lo que bien pudo ser un gabinete copado por fundadores y directivos del partido Movimiento Semilla, ha resultado –a la luz de los datos provistos– una moderada mezcla de líneas ideológicas, y de capacidades en la administración pública.  

El cargo de ministro de Estado es, por definición, político; por ello no se puede decir que los nombrados son “más bien técnicos que políticos”. En todo caso, calificarles de tecnócratas es más preciso.  

Arévalo se hace acompañar de 7 hombres y 7 mujeres, en un guiño al progresismo que ve valor en la simple paridad numérica de género; trascendiendo esa incidencia, cuando menos a criterio del presidente electo, los anunciados llenan los requisitos constitucionales de capacidad, idoneidad y honradez. En su desempeño demostrarán –o no– si la apuesta de Arévalo fue correcta. 

Sin entrar al detalle de cada uno de los futuros ministros –se hace en un espacio distinto– merecen mención Anabella Giracca (fundadora de Semilla) y Jonathan Menkos (excandidato vicepresidencial y diputado electo por ese partido) como figuras plenamente identificadas con el partido.  

En el caso de la futura ministra de Educación –y por la definición ideológica del partido– es de esperar que pretenda insertar los postulados del progresismo en el currículo educativo. Cabe recordar que, según mediciones hechas oportunamente, si bien Semilla ganó la presidencia y 23 diputaciones, la mayoría de sus votantes no se identifican como progresistas. 

Menkos, futuro ministro de Finanzas, ha formado parte de entidades como el ICEFI que se identifica como un “centro de pensamiento” enfocado en el tema fiscal. No será sorpresa que pretenda aumentar la carga impositiva, sin que esto implique, necesariamente, la creación de nuevos impuestos. Por declaraciones de campaña de Arévalo, más bien lo que buscará es ampliar la base tributaria (cobrarle impuestos a quienes ahora no pagan). 

Otras dos mujeres del futuro gabinete han causado ruido entre quienes apoyaron Arévalo en las urnas: Anaité Guardado en Energía y Minas, y Jazmín de la Vega en Comunicaciones. Ambas vienen del sector privado, lo que ha chocado con los radicales de Semilla y, cuando menos en redes sociales, con buena parte de sus votantes, que seguramente esperaban distinto. A la interrogante de quienes cuestionan la inclusión en el gabinete de ellas dos, se ofrece la explicación de que es precisamente en el sector privado en donde se encuentran los mejores cuadros; es encomiable que acepten el reto del servicio público. 

Bernardo Arévalo, Karin Herrera, ministros, secretarios de estado y demás funcionarios designados tendrán responsabilidad civil por sus actos durante 20 años luego de dejar el cargo, según el artículo 155 de la Constitución. Por ahora solo han sido anunciados los ministros y falta ver quienes más integrarán el gabinete de gobierno, así como quienes dirigirán las varias entidades descentralizadas en donde el Ejecutivo tiene potestad de nombramiento. 

En una semana tomará posesión el nuevo gobierno y entonces, ya no serán suficientes los anuncios de nombramientos, sino que se espera ejecución.